Combescot narra los entresijos del Versalles del siglo XVIII como si hubiera sido testigo directo de los mismos. Demuestra ser un conocedor apasionado de los escenarios y protagonistas de esa comedia humana: se divierte, juzga, comenta, acaricia o da patadas según sus afinidades. La condesa Jeanne de la Motte Valois intenta por todos los medios recuperar el estatus social y el poder económico que le corresponderían por pertenecer a la estirpe real de los Valois.